Ya hablamos la semana pasada de la importancia de conocer
nuestra Historia para no volver a tropezar con la misma piedra. En está ocasión
queremos señalar lo indispensable que es para cada uno de nosotros aprender
sobre la evolución del ser humano… ¿Cuándo empezamos a ser realmente
humanos?.... ¿Y el eslabón perdido….dónde anda?
Desde hace un poco más de un siglo, para ser más exactos,
desde que en 1859 Charles Darwin escribiera “El origen de las especies”,
empezamos a ser conscientes de que los seres vivos evolucionan, entre los
cuales nos incluimos. Desde entonces, muchas dudas han invadido nuestro estado
de bienestar…conocer tal realidad fue difícil de asumir. En cualquier caso, y
aún teniendo las pruebas presentes…nunca dejaremos de preguntarnos sobre
nuestro origen, y, desde luego, aun teniendo las pruebas delante, creo que nunca
dejaremos de debatir sobre el tema…lo cual no deja de ser hermoso…siempre y
cuando se discuta con respeto.
Pero, ¿qué es lo que realmente nos diferencia de los
animales? En este caso, debemos diferenciar entre Hominización, que es el
proceso por el cual comenzamos a evolucionar físicamente; con Humanización, que
es cuando los homínidos comienzan a preguntarse sobre la vida y la muerte, a
intentar dejar su huella en el Mundo, y, sobre todo, comienzan a plasmar su
cultura a través de adornos, esculturas o pinturas. Es decir, somos humanos
porque nos preguntamos sobre nuestros límites, sobre la muerte y si hay algo
más allá, sobre si hay algo en ese más allá que nos protege; en fin, somos
humanos porque nos hacemos preguntas y porque tenemos una cultura que
intentamos materializar.
PALEOEDUCA os invita a aprender sobre todas esas especies y
subespecies de homínidos que precedieron a la nuestra (Homo Sapiens Sapiens), con talleres adaptados tanto para nuestros chavales de Primaria, como para la E.S.O., y también para nuestros chicos y chicas de Bachillerato… ¡¡Sin
duda será una aventura fascinante!!